EditoRed

ASOCIACIÓN DE EDITORES DE MEDIOS DE COMUNICACIÓN DE LA UE Y AMÉRICA LATINA

Artículos

Artículos

El VIII Congreso de EditoRed evaluará el impacto de la Inteligencia Artificial en el periodismo y en los medios de comunicación, la forma en la que está transformando la producción, distribución y el consumo de contenidos, así como los desafíos éticos y regulatorios que plantea.

Teniendo en cuenta que este congreso cumple la labor de ser una actividad preparatoria para la Cumbre CELAC-UE, en este encuentro los congresistas también evaluarán el estado de las relaciones entre Europa y América Latina, las oportunidades de cooperación y el rol de los medios de comunicación en los conflictos internacionales y en la coyuntura geopolítica actual.

A continuación publicamos artículos de nuestros congresistas sobre estos temas:

Alberto Barciela

*Director del VIII Congreso de Editores Europa América Latina Caribe

RECADO DE ESCRIBIR PARA ÁLVARO MUTIS

Hasta Cartagena llegaremos para “entregar ciertos mensajes, disolver ciertas frágiles certezas y dejarnos en el desamparo de inconfesables perplejidades”. Ojalá nuestras palabras, los abrazos en el reencuentro fraternal nos permita, como la insistente lluvia “reunida en alegres torrenteras”, lavar toda la miseria de nuestros días, toda la crueldad, el hambre, el delirio, la sorda y mezquina furia”. Que todo se lo lleve la lluvia hasta que nos quedemos sin otra cosa que nos separare del aire viajero, “que el agua transparente que cae de lo más alto del cielo” o de nuestras intenciones, nos descubra en la libertad que nos ha reunido ya en ocho ocasiones históricas.

No es todo lo que quería decirle. Ni siquiera he comenzado. Lo cual, desde luego, no importa. “Con usted, admirado Álvaro, no es necesario decir las cosas porque ya las sabe desde antes, desde siempre”, incluso desde cuando la Inteligencia Artificial no era sino un espejismo de irrealidad, casi imposible de imaginar incluso por los que inventaron la realidad mágica. Y todo en tiempo de la renombrada globalización, “o sea -en sus palabras-, que no seamos nada, cuando quieren que seamos todos los mismos, es ser nada.” Mutas, mutante, Mutis. Es una broma, claro.

Avanzamos sin que sepamos hacia donde, hacia los espurios intereses de no se sabe quiénes, aunque los intuyamos tras fantasmagóricas corporaciones y apellidos monosilábicos; Trump, Musk, etc. “Maqroll lo decía igual pero de otra manera. Decía: “La caravana agota su significado en su mismo desplazamiento. Lo saben las bestias que la componen, lo ignoran los caravaneros. Siempre será así.” Y llegaremos a donde no se sabe, para intentar justificarnos con palabras los unos de los otros: los conquistados por consolarnos, los conquistadores para justificar el porqué de tanta avaricia. Entre todos destruiremos la magia de sabernos humanos y de haber consolidado culturas, tradiciones, puentes de progreso hacia un bienestar utópico a veces pero casi suficiente si nos conformamos con respetar al otro.

Es verdad Álvaro, tú lo has dicho: “Es un lugar común hablar sobre cómo el colonialismo envilece por igual al colonizador y al explotado.” Quizás el drama intuido estaba preescrito por tu genialidad intuitiva: “Nosotros somos de una tierra determinada con un pasado, con un destino que nos marca. Borrar eso es borrar nuestra condición humana”. “A mayor lucidez mayor desesperanza y a mayor desesperanza mayor posibilidad de ser lúcido.” “Acéptelo o no, el mundo ya es una lección. No hay que aceptarla o rechazarla. Hay que irla asimilando, integrando a tu ser, conociendo mejor para que forme parte de tu pensamiento.” En ello radica la belleza, lo hermoso, cuanto nos justifica como individuos, como tribu, como civilización.

Lo sabías: “Después de tantos años de travesía por el mundo, sé que el antídoto contra el desaliento se cifra en la amistad, el amor… y la poesía”, la misma que “revela al hombre la verdad sobre sí mismo.” Y quizás eso mismo fue lo que en la dedicatoria de su novela “El general en su laberinto”, le llevó a Gabriel García Márquez, a deslizar una frase que ha dado lugar a numerosas especulaciones: «Para Álvaro Mutis, que me regaló la idea de escribir este libro». Quizás tú sabía que era a él a quien le correspondía escribir lo que tú bien conocías, y le ofreciste tu generosidad.

“No hay que pasarse de listo con el mundo”, nos adviertes. “El que es listo es el mundo, eso nunca hay que olvidarlo”. Asiento, y recuerdo contigo, lo que le oíste decir a la poeta argentina María Negroni hace tiempo, un verano: “La escritura es siempre más inteligente que nosotros.” Hay que aprender pues a aceptar las cosas como se nos van presentando, a saber que nada finalmente es grave, y que las palabras pueden ayudarnos a contar el mundo, incluso a hacerlo con amabilidad en sus peores horrores, hay que denunciarlos sí, pero con cortesía e inconformismo, con susurros y con gritos suaves, con diplomacia, siempre intentando que las armas callen. Hay que buscar el placer de leer con goce aun en medio de profundas sospechas de fracaso, entre el escepticismo resignado del que sabe la verdad y que pese a saberla es capaz de hacer un hueco a la felicidad, aceptándose a sí mismo y en sus circunstancias, mientras conjura y destruye el miedo en el que vive como miembro de una “especie que falló como especie.”


“Que te acoja la muerte con todos tus sueños intactos.” Es uno de tus conjuros como chamán de las palabras. Ese es la manera de “(…) Prolongar la soledad sin temor al encuentro con lo que en verdad somos, con el que dialoga con nosotros y siempre se esconde para no hundirnos en un terror sin salida.”


Siguiendo tu consejo, por unos días intentaremos extraer de Cartagena de Indias la lección de no mezclar la miseria con los asuntos de cada día, y aprenderemos a guardarla como abono para cultivar el lino con el que tejer la biografía de nuestros testimonios sobre el planeta azul, con voz de verdad contrastada y creíble, recurriendo a los secretos repliegues de nuestras caligrafías historiadas, seremos así testimonio fiel de la crueldad de la que hemos sido capaces, de la bella intención de no herir más allá de lo necesario, sin renunciar a la denuncia, acompañando a los valientes, conscientes de la necesidad de contar sin rencor ni crueldad, si es posible distrayendo la memoria a lo inocentes, pero no olvidando, todo para resguardar el precario equilibrio de nuestros días.


Como periodistas somos conscientes de “saber que, a veces, nadie escucha a nadie. Nadie sabe nada de nadie. Que la palabra -ni digamos ya las redes o la IA-, ya, en sí, es un engaño, una trampa que encubre, disfraza y sepulta el precario edificio de nuestros sueños y verdades, todos señalados por el signo de lo incomunicable.” Pero nuestra vocación es poderosa, disponemos de mucho, al menos de la decidida voluntad de entregar hasta la última gota de nuestros tinteros, de nuestra sangre si preciso fuera, para poner al día al mundo de sus propios males y tratar así de evitar otros mayores.


“Ahora, lo importante es aprender a ver, llegar a saber ver, ver todo: las cosas, las personas, el cielo, los montes, el mar y sus criaturas. Todo lo que vemos esconde siempre una parte, la deja en la sombra. Allí hay que llegar, iluminar, descubrir, descifrar.” Aquí estamos, en Colombia, dispuestos a decir lo que otros hubieron querido que callemos.


Y termino con tus palabras en uno de los más hermosos poemas que se pudo escribir al apóstol Santiago, tu Nocturno en Compostela, “con esas palabras simples con las que se hace presente la verdad”: “Sí, todo está en orden, todo lo ha estado siempre en el quebranto y terco corazón de los hombres”. Por eso somos en esencia periodistas, porque somos y queremos ser ante todo humanos y sensibles.


Lo he dicho. “No es todo lo que quería decirle. Ni siquiera he comenzado. Lo cual, desde luego, no importa. Con usted no es necesario decir las cosas porque ya las sabe desde antes, desde siempre.” Muchos besos y toda la nostalgia de quien le extraña mucho.

ANTONIO SAN JOSÉ

*Socio Grupo Kreab (España)

Inteligencia Artificial: Ventajas y riesgos para el periodismo

De repente, en muy poco tiempo, los profesionales de la información nos hemos encontrado con una nueva realidad que ha crecido y se ha desarrollado ante nuestros ojos con una velocidad sorprendente. La irrupción de Chat GPT supuso el inicio de una auténtica revolución en el oficio basada en la denominada Inteligencia Artificial, una especie de “bálsamo de Fierabrás” en el que algunos han creído ver un futuro pleno de bienes sin amenazas de ningún tipo. Y no es así, en absoluto.

OpenAI, se ha convertido en el oscuro objeto de deseo del multimillonario Elon Musk, antiguo socio de Sam Altman, hoy convertido en su íntimo enemigo. A su vez, el magnate, nuevo mejor amigo de Donald Trump, ha puesto sobre la mesa casi 100.000 millones de dólares para hacerse con una compañía en la que ve un valor que supera claramente los limites de lo estrictamente comercial. La súbita aparición de la empresa china DeepSeek, ha agitado las aguas de un ecosistema en el que se prevé que actúen en un futuro próximo nuevos y potentes competidores. La Inteligencia Artificial es, y así es la forma correcta de verlo, un excelente aliado para auxiliar a los periodistas en tareas de poco valor añadido o que pueden reducir muy sensiblemente los tiempos de elaboración de sus informaciones. Con esta nueva tecnología es posible traducir textos con enorme precisión, buscar documentación, segmentar resultados, transferir conferencias a texto escrito, establecer patrones de comportamiento, analizar publicaciones y muchas tareas más que suponen, sin duda, un gozoso hallazgo en la vida de los autores de textos informativos.

El peligro es que algunos, los más laxos o perezosos, sientan la tentación de que la tecnología haga el trabajo por ellos otorgando a la máquina la potestad de elaborar falsillas y redacciones de corte mecánico. El riesgo absoluto de eliminar, o minimizar, el “factor humano” nos conduciría a un periodismo automático, frío, sin alma, pulso ni creatividad. Por muchos avances que lleguen a la profesión siempre, y en todos los casos, va a ser necesaria la intervención de un profesional que aporte su experiencia y su capacidad de verificar la autenticidad de los datos  y las informaciones.

 

El otro gran riesgo, en mi opinión, es la incapacidad para distinguir entre lo verdadero y lo falso. Podemos escuchar audios en los que la voz reconocida de un personaje público dice cosas que éste jamás ha pronunciado. La máquina es capaz de aprender de las formas de hablar y poner en boca de cualquiera  expresiones y contenidos completamente falsos. De igual manera, cada vez cuesta más trabajo distinguir entre una imagen,  fija o animada, creada por AI o captada de la vida real. Ya no es posible creer en lo que se ve y en lo que se escucha, ahora es preciso asegurarse de su autenticidad y aplicar los cinco sentidos para evitar ser víctima de una noticia “fake” y, lo que es más grave aún, utilizar esa creencia para difundirla al publico en cualquier soporte. Todo un desafío.

Nos encontramos ante un momento crucial de la profesión en la que, sin negarnos al progreso, hemos de extremar las cautelas para que no nos arrolle y destruya nuestra credibilidad como periodistas. Como siempre ha ocurrido, los avances tecnológicos son buenos y malos al mismo tiempo, todo depende de su uso. Por ello la preparación y la formación de los profesionales de la información se revela imprescindible y, con ella, la reivindicación de los valores que debe acreditar todo periodista. Hoy son cada vez más inexcusables la ética y la deontología profesional. La honestidad, el desvelo por la verdad, el rigor, la comprobación, el contraste y la conciencia de estar trabajando con un material sensible, son extremos que no podemos ignorar como colectivo. Sencillamente, porque resultan más necesarios que nunca antes.

MANUEL SÁNCHEZ

*Director de Prestomedia Grupo en Italia

Producción periodística e Inteligencia Artificial: Bondades para los medios de comunicación

Introducción

La inteligencia artificial (IA) está transformando radicalmente la producción periodística, ofreciendo herramientas que potencian la eficiencia, la creatividad y la profundidad del análisis informativo. Lejos de ser una amenaza para el periodismo tradicional, la IA se presenta como una aliada indispensable que permite optimizar procesos, mejorar la calidad del contenido y ampliar la cobertura informativa. Como señala Nicholas Diakopoulos1, la IA no reemplaza al periodista, sino que lo empodera, proporcionándole nuevas capacidades para analizar grandes volúmenes de datos y generar narrativas innovadoras.

En este artículo, exploraremos cómo la IA beneficia a los medios de comunicación, especialmente aquellos que producen contenidos en español, italiano y portugués, tres lenguas con una rica tradición periodística y un gran futuro. A lo largo del texto, destacaremos cómo la automatización, el procesamiento del lenguaje natural y las herramientas de análisis avanzadas están redefiniendo el ecosistema informativo, brindando nuevas oportunidades para la industria mediática en términos de eficiencia, calidad y acceso a la información.

  1. La automatización como aliada del periodista

Uno de los mayores aportes de la IA al periodismo es la automatización de tareas repetitivas y de bajo valor agregado. Los sistemas de IA permiten generar noticias de forma rápida y precisa en áreas como finanzas, deportes y meteorología. Un claro ejemplo de esto es el uso de herramientas como Heliograf2, el sistema de IA desarrollado por The Washington Post, que cubre automáticamente eventos deportivos y elecciones, permitiendo a los periodistas enfocarse en reportajes más complejos y analíticos. Además, la automatización facilita la producción de noticias en tiempo real, reduciendo los tiempos de respuesta ante eventos de última hora y mejorando la precisión en la entrega de datos. Herramientas como Wordsmith o Quill han demostrado ser especialmente útiles en la generación de informes financieros y análisis de tendencias, transformando grandes volúmenes de datos en narrativas comprensibles y accesibles para el público.

Desde una perspectiva optimista, esta automatización no solo libera tiempo para que los reporteros investiguen y produzcan contenido de mayor calidad, sino que también garantiza una cobertura más amplia y constante de noticias que, de otro modo, podrían pasar desapercibidas. Como afirma el investigador Andreas Graefe en su estudio Guide to Automated Journalism (2016)3, “el periodismo automatizado no pretende reemplazar el trabajo humano, sino complementarlo mediante la eficiencia y la escalabilidad”. Asimismo, la IA permite a los periodistas centrarse en tareas de mayor valor, como la investigación en profundidad, la verificación de datos y el periodismo de investigación, fortaleciendo así el papel de la prensa en la sociedad y su función de garantizar información veraz y relevante, como veremos más adelante.

  1. Mejora en la accesibilidad y personalización de la información

La IA también permite una personalización sin precedentes del contenido periodístico, adaptando las noticias a los intereses y preferencias de cada usuario. Gracias a algoritmos de recomendación avanzados, los medios pueden ofrecer experiencias más relevantes a su audiencia, aumentando el engagement y fortaleciendo la relación con los lectores.

Además, herramientas de traducción automática como DeepL o Google Translate han mejorado notablemente en los últimos años, facilitando la difusión de noticias en múltiples idiomas. Esto es especialmente beneficioso para los medios que producen contenido en español, italiano y portugués, permitiendo que sus reportajes alcancen audiencias globales sin perder calidad ni precisión en la traducción.

En este sentido, la IA se convierte en un puente entre culturas y lenguas, democratizando el acceso a la información y permitiendo que voces diversas tengan un impacto global. Como indica el investigador Luciano Floridi en The Fourth Revolution: How the Infosphere is Reshaping Human Reality (2014)4, “la inteligencia artificial no solo transforma la manera en que procesamos información, sino también la forma en que interactuamos con el conocimiento y el mundo que nos rodea”.

  1. Verificación de hechos y lucha contra la desinformación

Uno de los mayores desafíos del periodismo actual es la proliferación de noticias falsas y la manipulación informativa. En este contexto, la IA se ha convertido en una herramienta clave para la verificación de hechos (fact-checking), permitiendo detectar patrones de desinformación y validar la autenticidad de las fuentes.

En portugués disponemos de Aos Fatos9, una iniciativa de fact-checking brasileña que utiliza IA para procesar rápidamente grandes volúmenes de contenido y verificar la exactitud de las afirmaciones hechas en el ámbito político y social. La plataforma está disponible en portugués y cubre temas que afectan a Brasil y a toda América Latina.

En italiano existe la plataforma Facta10, una iniciativa italiana de verificación de hechos que combate la desinformación utilizando tecnologías de procesamiento de lenguaje natural y algoritmos para identificar y validar afirmaciones en los medios de comunicación. La IA ayuda a la organización a gestionar la enorme cantidad de información circulante en Italia y garantiza que los datos sean verificables y precisos.

También existe una interesante herramienta (en inglés, francés y portugués) en el continente africano, Africa Check11, una de las principales plataformas de verificación de hechos, que cubre múltiples idiomas. Utiliza inteligencia artificial para identificar patrones en las noticias y proporciona informes detallados sobre la veracidad de las afirmaciones políticas y sociales en el continente africano.

En Francia contamos con Détecteurs de rumeurs12, plataforma para detectar rumores y noticias falsas que circulan en redes sociales y medios. Cubre una amplia variedad de temas, desde política hasta salud pública.

Estas herramientas no solo permiten un enfoque más rápido y preciso en la verificación de hechos, sino que también ayudan a construir un entorno informativo más confiable y transparente, lo cual es crucial en tiempos de abundancia de información y desinformación.

El filósofo y experto en IA, Yuval Noah Harari, señala en 21 Lessons for the 21st Century (2018)13 que “en un mundo donde la información es poder, la capacidad de distinguir la verdad de la manipulación será una de las habilidades más valiosas”. En este sentido, la IA no solo fortalece el periodismo, sino que también protege la democracia y la transparencia informativa.

  1. El impacto en los medios de comunicación de habla hispana, italiana y portuguesa

El periodismo en español, italiano y portugués ha encontrado en la IA una gran oportunidad para expandir su alcance y mejorar su competitividad en el escenario global. Estos idiomas, que cuentan con cientos de millones de hablantes, se benefician de herramientas como la transcripción automática, el análisis de sentimientos y la generación de resúmenes automatizados, que facilitan la producción de contenido de alta calidad.

En países de América Latina y Europa la IA permite optimizar la producción de noticias y mejorar la eficiencia operativa. Por ejemplo, en Brasil, el uso de sistemas automatizados para la cobertura electoral ha permitido un seguimiento más preciso y en tiempo real de los resultados, brindando información fiable a millones de ciudadanos.

En Italia, medios como La Repubblica han integrado la IA para analizar tendencias en redes sociales y detectar temas emergentes antes de que se conviertan en noticias virales. Esto permite a los periodistas anticiparse a los acontecimientos y ofrecer un enfoque más profundo y contextualizado.

  1. El futuro del periodismo con IA: una sinergia prometedora

Lejos de representar una amenaza para el periodismo, la inteligencia artificial se perfila como un catalizador de innovación y creatividad en los medios de comunicación. La clave para aprovechar su potencial radica en encontrar un equilibrio entre la automatización y el talento humano, asegurando que la tecnología potencie la labor periodística en lugar de reemplazarla.

Como sugiere el profesor Klaus Schwab en The Fourth Industrial Revolution (2016)14, “la verdadera revolución no radica en la tecnología en sí misma, sino en la manera en que la humanidad la integra en su vida cotidiana”. En el ámbito periodístico, esta integración debe orientarse hacia la ética, la transparencia y el compromiso con la verdad, garantizando que la IA sea una herramienta al servicio de la sociedad y no un factor de desinformación o manipulación.

Conclusión

El periodismo y la inteligencia artificial están construyendo una relación simbiótica que redefine la manera en que se produce y consume la información. Los beneficios de la IA en los medios de comunicación en español, italiano y portugués son innegables: automatización de tareas, personalización de contenidos, verificación de hechos y ampliación del acceso a la información son solo algunos de los aspectos positivos de esta revolución tecnológica.

En este contexto de cambio y evolución, la clave no es temer a la IA, sino comprender su potencial y utilizarla de manera ética y responsable. El futuro del periodismo no está en la sustitución del reportero por algoritmos, sino en la sinergia entre la creatividad humana y la precisión de la inteligencia artificial, en un modelo donde la tecnología fortalezca el derecho a la información y la democracia. Como decía el célebre periodista Ryszard Kapuściński, “para ser buen periodista, ante todo hay que ser buena persona”; y en esta nueva era, la IA puede ser la herramienta que potencie la humanidad del periodismo, llevándolo a nuevos horizontes de innovación y excelencia.

 

  1. Automating the News: How Algorithms Are Rewriting the Media (2019) https://www.amazon.com/Automating-News-Algorithms-Rewriting-Media/dp/0674976983
  2. https://www.ufasta.edu.ar/comunicacion/heliograf-el-robot-de-the-washington-post-que-no-reemplaza-a-los periodistas/
  3. https://www.cjr.org/tow_center_reports/guide_to_automated_journalism.php
  4. https://global.oup.com/academic/product/the-fourth-revolution-9780199606726?cc=pl&lang=en&
  5. https://fullfact.org/
  6. https://chequeado.com/
  7. https://www.politifact.com/
  8. https://maldita.es/ 
  9. https://www.aosfatos.org/
  10. https://www.facta.news/chi-siamo
  11. https://africacheck.org/
  12. https://www.sciencepresse.qc.ca/detecteur-rumeurs
  13. https://www.amazon.it/lecciones-para-siglo-Lessons-Century/dp/1949061000
  14. https://www.weforum.org/about/the-fourth-industrial-revolution-by-klaus-schwab/

PABLO VACA

*Editor Jefe del Clarín - Argentina

Producción Periodística e Inteligencia Artificial: Bondades para los Medios de Comunicación

La intersección entre la producción periodística y la inteligencia artificial (IA) se ha convertido en un tema de creciente interés y relevancia en el mundo actual. A medida que la tecnología avanza, los medios de comunicación buscan aprovechar las herramientas digitales para optimizar sus procesos, mejorar la calidad de su contenido y, en última instancia, satisfacer las demandas de una audiencia en constante evolución. La inteligencia artificial puede ser una aliada invaluable para los medios de comunicación en Latinoamérica, por el potencial que ofrece para transformar la producción periodística.

  1. Automatización de Tareas Repetitivas

Una de las principales ventajas de la IA en el ámbito periodístico es su capacidad para automatizar tareas repetitivas y tediosas. Los periodistas a menudo se ven abrumados por la cantidad de información que deben procesar diariamente, desde la recopilación de datos hasta la redacción de informes. La implementación de herramientas de IA puede ayudar a agilizar estos procesos. Por ejemplo, la automatización en la transcripción de entrevistas y la recopilación de datos estadísticos permite a los periodistas dedicar más tiempo a la investigación y al análisis crítico.

  1. Análisis de Datos en Tiempo Real

La IA tiene la capacidad de analizar grandes volúmenes de datos en tiempo real, lo que resulta especialmente útil en la era de la información. Los medios de comunicación pueden utilizar algoritmos de aprendizaje automático para identificar tendencias, patrones y correlaciones en los datos que de otro modo serían difíciles de discernir. Esto no solo mejora la calidad de las noticias, sino que también permite a los periodistas ofrecer un análisis más profundo y contextualizado sobre los acontecimientos actuales. En un continente como América Latina, donde los datos sobre cuestiones sociales, políticas y económicas son vitales, esta capacidad es esencial para informar de manera precisa y responsable.

  1. Personalización del Contenido

La inteligencia artificial permite a los medios de comunicación ofrecer una experiencia más personalizada a sus lectores. A través de algoritmos que analizan el comportamiento y las preferencias del usuario, los medios pueden adaptar el contenido que presentan a sus audiencias, aumentando así la relevancia y el compromiso. Esta personalización no solo se limita a la selección de artículos, sino que también puede abarcar formatos y estilos de presentación, desde videos hasta infografías interactivas. En un contexto donde la atención del lector es cada vez más difícil de captar, la personalización se convierte en una herramienta fundamental para mantener la relevancia de los medios.

  1. Mejora de la Veracidad Informativa

La proliferación de noticias falsas y desinformación es uno de los desafíos más grandes que enfrentan los medios de comunicación hoy en día. La IA puede desempeñar un papel crucial en la verificación de hechos y la lucha contra la desinformación. Herramientas de IA pueden analizar contenido en línea, identificar fuentes no verificadas y proporcionar análisis sobre la veracidad de las afirmaciones. Esto no solo ayuda a los medios a mantener la integridad de su contenido, sino que también fortalece la confianza del público en las instituciones periodísticas.

  1. Generación de Contenido

La generación de contenido mediante IA es otra área en la que se están realizando avances significativos. Algunas herramientas ya son capaces de redactar artículos básicos sobre temas específicos, como resultados deportivos o informes financieros. Aunque aún se necesita la intervención humana para dar contexto y profundidad, esta capacidad permite a los periodistas centrarse en historias más complejas y de mayor valor añadido. En un entorno donde la rapidez es clave, la IA puede ser un aliado en la producción de contenido oportuno y relevante.

  1. Soporte en la Toma de Decisiones Editoriales

La IA puede contribuir a la toma de decisiones editoriales al proporcionar análisis predictivos sobre el rendimiento de las historias y el comportamiento de la audiencia. A través de modelos de datos, los medios pueden prever qué tipo de contenido resonará más con sus lectores, lo que les permite ajustar sus estrategias de publicación y distribución en consecuencia. Esta capacidad de anticipación es especialmente valiosa en un panorama mediático tan competitivo, donde la capacidad de reaccionar rápidamente a las tendencias puede marcar la diferencia entre el éxito y el fracaso.

  1. Fomento de la Innovación

La integración de la inteligencia artificial en la producción periodística fomenta un ambiente de innovación dentro de los medios de comunicación. Al adoptar nuevas tecnologías, los editores y periodistas tienen la oportunidad de experimentar con diferentes formatos y enfoques narrativos. Esta innovación no solo mejora la calidad del contenido, sino que también puede atraer a nuevas audiencias y revitalizar el interés de los lectores existentes. En un continente donde los medios han enfrentado desafíos económicos y de credibilidad, la innovación se presenta como una vía para revitalizar el sector.

  1. Desafíos y Consideraciones Éticas

A pesar de las numerosas bondades que presenta la inteligencia artificial, también es fundamental abordar los desafíos y consideraciones éticas que surgen con su implementación. La dependencia excesiva de la IA puede llevar a la deshumanización del periodismo y a la pérdida de la voz y la perspectiva humana que son esenciales en la narración de historias. Además, la transparencia en el uso de algoritmos y la protección de datos personales son aspectos que deben ser priorizados. Los medios deben asegurarse de que la IA se utilice como una herramienta complementaria que enriquezca el trabajo periodístico, en lugar de sustituir la creatividad y la ética que son inherentes a la profesión.

Conclusión

La relación entre la producción periodística y la inteligencia artificial representa una oportunidad emocionante para los medios de comunicación. Al aprovechar la automatización, el análisis de datos, la personalización del contenido y las capacidades de verificación, los medios pueden no solo mejorar su eficiencia y relevancia, sino también fortalecer la confianza del público. Sin embargo, es esencial que esta integración se haga de manera ética y reflexiva, asegurando que la esencia del periodismo, que es contar historias significativas y veraces, no se pierda en el camino. En un mundo donde la información es poder, la combinación de la inteligencia artificial y el periodismo puede ser un camino hacia un futuro más informado y responsable.

*(PD: OK, hice trampa. Acabo de llegar de mis vacaciones, tengo montañas de trabajo atrasado y uno de ellos era escribir este texto para el VIII Congreso de EditoRed. Entonces se me ocurrió pedir ayuda. Y escribí, en ChatGPT, “Escribe un texto de 1000 palabras sobre el tema “Producción periodística e Inteligencia Artificial. Bondades para los medios de comunicación”, con la idea de publicarlo en una red de editores latinoamericanos”. En 10 segundos estaba listo todo el texto que antecede estas palabras. Le toqué dos pavadas. Y se podría publicar perfectamente. No va a ganar el Pulitzer, pero tampoco desentonaría en las páginas de varios de nuestros periódicos. En fin: que hay que pensar mucho mucho en la IA. Puede ser la mejor herramienta de la que hayamos dispuesto jamás. O el peor enemigo que el periodismo haya tenido jamás. Creo que es pronto para decirlo, pero la clave será no dejar de reflexionar sobre el asunto ni un instante)

RICARDO ALEXANDRE

*Director Adjunto de Radio TSF - Portugal

OpenEuro: la vía europea sin portugués en el lenguaje de la inteligencia artificial

OpenEuro LLM es un proyecto que pretende crear modelos de Inteligencia Artificial transparentes, con las distintas lenguas europeas. Es una tercera vía -por ahora, sin portugués- que pretende dar respuesta a un mercado en el que ya dominan los gigantes estadounidenses y chinos. TSF ha hablado con el coordinador.

Open Euro LLM es la solución europea en el lenguaje de la Inteligencia Artificial. Se trata de un proyecto innovador con una inversión inicial de hasta 90 millones de euros, en el que no participa ninguna empresa o institución portuguesa y que pretende desarrollar modelos lingüísticos a gran escala. ¿Es, en esencia, la respuesta europea al Chat GPT estadounidense o al Deep Seek chino? El coordinador del proyecto, Jan Hajič, de la Universidad Charles de Chequia, prefiere decir, en una entrevista con TSF, que se trata de una solución necesaria en Europa, que abarca todas las lenguas habladas en la Unión Europea.

«Bueno, no es exactamente contrarrestar, sino desarrollar una solución que es necesaria en Europa, dadas las condiciones específicas que existen en Europa, lo que significa que tenemos que tener un modelo que funcione muy bien para todas las lenguas europeas. No es el caso de los modelos que vienen del Este o del Oeste, pero ese será sin duda nuestro objetivo. Y también ser un modelo abierto, como hemos dicho antes», explicó Jan Hajič a TSF.

Dice que «no se trata de competencia directa, en el sentido de que queramos tener un gran modelo que supere a otro en los benchmarks, sino una solución accesible a las empresas europeas que puedan desarrollar aplicaciones e innovaciones basadas en estos modelos, y hacerlo en todos los idiomas europeos de la mejor manera posible para todas ellas».

Una especie de ChatGPT europeo, pero que se compromete a seguir la legislación y las normas de la UE: «Por supuesto, esa es la condición necesaria, porque ahora con la ley de IA en vigor, aunque todavía hay que aplicarla con exactitud, queremos asegurarnos de que todo lo que hagamos pueda utilizarse para cualquier aplicación, incluidas las que están cubiertas por la normativa, como las aplicaciones de IA de alto riesgo.»

El consorcio que está detrás del proyecto empezó a trabajar el día 1, con el apoyo financiero de la Comisión Europea. Jan Hajič admite que entre las dos docenas de empresas e instituciones participantes no hay ningún portugués.

«Ahora mismo no hay ninguna empresa portuguesa, pero queríamos mantenerlo lo más pequeño posible, aunque incluso 20 es un número bastante grande de socios, lo que ya será un reto de coordinar. Así que queríamos mantener el proyecto relativamente pequeño, pero estamos abiertos a la colaboración o a la experiencia de personas que hayan construido algo en el pasado. Así que vamos a crear una junta de asociación estratégica abierta, a la que invitaremos a personas de la industria y el mundo académico, incluso no europeos, que tengan la experiencia necesaria para ayudarnos. Y esto podría incluir a gente de Portugal, porque por supuesto conocemos empresas y universidades en Portugal que son muy buenas construyendo esto».

Entre los principales participantes hay empresas, universidades, laboratorios y centros de computación de alto rendimiento de apenas una docena de Estados miembros de la UE (incluida España, a través del Centro Nacional de Supercomputación de Barcelona), además de Noruega. Jan Hajič asegura a TSF que no hay razones políticas ni técnicas para no contar con portugueses en el consorcio: «Portugal forma parte de la UE, así que incluso dadas las restricciones del programa Europa Digital, podrían haberse incorporado portugueses. Sólo nos propusimos mantener el proyecto en esta fase con el menor número posible de socios. Hay otros países que tampoco están directamente representados. Por desgracia, no hemos podido contar con algunos de los otros socios con los que trabajábamos antes, porque las normas simplemente no lo permiten. La atención se centra en Europa en general, la mitad de la cual es dinero público europeo. Así que realmente queremos centrarnos en algo que sea útil para Europa y para la industria y los servicios europeos, que funcione muy bien en todas las lenguas europeas. Ese es nuestro objetivo. Y en ese sentido, esperamos tener una solución que cuente con el favor de la industria europea, porque cubrirá todas las lenguas europeas mejor que los modelos actuales, al menos para muchas de ellas».

La Comisión Europea ha concedido a OpenEuroLLM la etiqueta STEP (Plataforma de Tecnologías Estratégicas para Europa) en reconocimiento a la excelencia del proyecto.

*Este artículo fue escrito originalmente en portugués.

VIII Congreso Editores CELAC-UE
Contacto

Envíanos un correo si quieres más información del Congreso

    Acceso a miembros

    Acceso a miembros